Además de poder navegar en condiciones excelentes, Guajirú ofrece otras actividades para aquellos días que quieras descansar del viento o simplemente hacer algo diferente y enriquecer tu viaje.
Paseos de buggy. Alrededor de las dunas, conocer lagos paradisíacos con agua transparente y pasear por las interminables playas de arena fina.
Paseos en jangada. Disfruta de un paseo en el barco típicamente del nordeste de Brasil hecho de madera usando simplemente la fuera del viento para desplazarse y que aún hoy los pescadores locales usan cada día para pescar.
Paseos en 4×4 hasta Jericoacoara. Para aquellos más inquietos o aventureros existe la posibilidad de combinar este destino con unos días en Jericoacoara o en otras playas del nordeste de Ceará como Cumbuco o Icaraizinho.
Noche. Aún sigue siendo un lugar característicamente tranquilo, por lo que aconsejamos desplazarse a Flexeiras, a unos 5 minutos en buggy, dónde hay una mayor oferta de bares y restaurantes para cenar o saborear alguna caipirinha o caipiroska dejándose llevar por el ritmo de vida tan tranquilo de este rincón de Brasil.
Chill out. Existe la simple e inteligente opción de no hacer nada. Túmbate en una hamaca, con un coco bien fresco, contempla lo que te rodea, disfruta de la puesta de sol, relájate y adáptate al ritmo local de vida.