Salvador de Bahía fue la primera capital del Brasil Colonial y es la ciudad más antigua de Brasil. Es una metrópoli con casi 3 millones de habitantes y también conocida como la Roma Negra, es la ciudad con el mayor porcentaje de población negra localizada fuera de África. Centro del Yoruba Candomblé y del baile marcial capoeira, Salvador tiene gran influencia cultural africana, no solo en la religión pero también se extiende a la comida y música.
La ciudad representa un bello ejemplo del urbanismo del siglo XVI y XVII, con la sede gubernamental en la ciudad alta y el centro comercial urbano en la ciudad baja. A su vez una gran parte de la ciudad ha conservado las viejas características de sus calles y sus coloridas casas, constituyendo el mayor conjunto de construcciones coloniales de América Latina. El Pelourinho de Salvador es el mejor ejemplo de esto, certificado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La ciudad posee más de 350 iglesias, con destaque para la Iglesia de Nuestro señor de Bonfim, de estilo rococó, donde se celebra la fiesta más importante de la ciudad tras el Carnaval.
Lo más colorido de las tradiciones bahianas se encuentra en el Mercado Modelo, un enorme mercado colmado de tiendas de arte y artesanía así como algunos típicos bares y restaurantes. Además, Salvador tiene numerosas playas a lo largo de la costa Atlántica, como la costa de la Bahía de Todos los Santos, dónde relajarse y bañarse en sus cálidas aguas.